GOTA

Carlos V fue un ilustre enfermo de GOTA y es conocida como “enfermedad de reyes y reina de enfermedades”

La gota se produce por un exceso de ácido úrico. Con el paso del tiempo los niveles elevados de ácido úrico en sangre (lo que en medicina se conoce como hiperuricemia) forma cristales de ácido úrico que se localizan en las articulaciones ocasionando los ataques de gota. Es más frecuente que se de en varones y está íntimamente ligada a la obesidad, hipertensión y diabetes.

 

 Se calcula que afecta al 0,3% de la población.

 

Las crónicas históricas siempre han achacado a Carlos V ataques de gota, pero un equipo de médicos del Hospital Clínico de Barcelona lo han corroborado ahora utilizando los últimos avances científicos.

 

En un estudio publicado en la revista “New England Journal of Medicine”, los científicos españoles han llegado a esta conclusión tras examinar minuciosamente una falange del dedo meñique del emperador que permanecía en la sacristía del Monasterio de El Escorial. Los médicos autores del estudio, señalan que el padecimiento de esta enfermedad le impidió muchas veces realizar sus labores de estado, y fue probablemente lo que le animó a posponer la batalla en la perdida plaza francesa de Metz. Posiblemente esta enfermedad le obligó a abdicar en el año 1556 en su hermano Fernando I.