Imagen Noticias

Maniobra de Heimlich

Primeros auxilios
Autor
Fraternidad-Muprespa

Estás disfrutando de una comida en un restaurante y de pronto tu acompañante se atraganta con un trozo de carne, no puede hablar ni respirar, ¡se está asfixiando!. Si no actúas rápido su vida corre peligro, ¿sabrías cómo ayudarle?.

Según indica la Agencia Madrileña de Atención Social cada año, mueren por asfixia debida a atragantamientos entre 1.400-1.900 personas en España (25% más de las muertes por accidentes de tráfico)”.

La maniobra Heimlich es un procedimiento que se usa para ayudar a una persona que se está asfixiando y que está consciente e incapaz de hablar. La maniobra de Heimlich expulsa aire de los pulmones de la persona y le provoca tos. La fuerza de la tos podría entonces sacar el objeto de sus vías respiratorias.

Cómo actuar en caso de atrangamiento:

  • Si la víctima está consciente y puede toser anímalo a seguir haciéndolo.
  • Si con la tos no consigue expulsar el objeto que le produce el atragantamiento ayúdale a doblarse hacia delante y dale hasta 5 palmadas fuertes en los omóplatos.
  • Si no consigue expulsar el objeto se debe realizar la maniobra de Heimlich:

  • El rescatador debe situarse directamente detrás de la persona que se asfixia y rodear su tronco con los brazos. Se debe cerrar un puño y colocarlo a mitad de camino entre el ombligo y la apófisis xifoides. Se debe cubrir el puño con la otra mano para realizar compresiones abdominales con la víctima en posición de pie o sentada. 

  • Aplique un impulso firme hacia adentro y hacia arriba tirando con ambos brazos hacia atrás y hacia arriba.

  • Repita las compresiones de 6 a 10 veces según sea necesario.

  • Continúe hasta que se elimine la obstrucción o sea posible un manejo avanzado de la vía aérea.

  • Si la persona pierde el conocimiento, comience la reanimación cardiopulmonar .

Cuidados posteriores

  • Transportar al paciente a urgencias tan pronto como sea posible, incluso después de la eliminación exitosa de la obstrucción de la vía aérea y la reanudación de la respiración normal.

Advertencias y errores comunes

  • La maniobra de Heimlich no debe intentarse si la persona que asfixia puede hablar, toser con fuerza o respirar adecuadamente.

  • En pacientes obesos y mujeres al final del embarazo, se usan compresiones torácicas en lugar de abdominales.