
EL SISTEMA NACIONAL DE SALUD CONTARÁ CON UN PROTOCOLO COMÚN PARA LA DETECCIÓN, ATENCIÓN Y SEGUIMIENTO DE LOS CASOS DE VIOLENCIA DE GÉNERO
La Ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, ha presentado hoy el Protocolo común para la actuación sanitaria ante la violencia de género en el Sistema Nacional de Salud (SNS), que va a implantarse de forma efectiva este año y que proporcionará a los profesionales sanitarios pautas de actuación homogéneas para la prevención, diagnóstico temprano, atención y seguimiento de los casos de violencia de género en los centros de salud y servicios de urgencias.
Durante la presentación, la Ministra ha señalado que con este protocolo se pretende, además, sensibilizar al personal sanitario y a la propia sociedad sobre la gravedad del fenómeno de la violencia de género, que se ha convertido en uno de los mayores abusos contra los derechos humanos y en uno de los problemas de salud pública más extendidos en el mundo actual.
Según datos del Consejo de Europa, entre el 20 y el 25% de las mujeres europeas ha experimentado violencia física al menos una vez en sus vidas, y una de cada diez europeas ha padecido violencia sexual. Cuando se analizan en conjunto todas las formas de violencia, incluido el acoso, el porcentaje de afectadas alcanza un 45%.
APUESTA DEL GOBIERNO
La Ministra ha subrayado que la violencia de género no es un problema privado, sino que el Estado, como garante de los derechos de los ciudadanos, tiene la responsabilidad de prevenir, investigar y penalizar esta forma de violencia. Así lo ha entendido el Gobierno español al aprobar la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, y en su cumplimiento ha venido trabajando el Ministerio de Sanidad y Consumo, en colaboración con otros Departamentos.
El Protocolo Común para la Actuación Sanitaria ante la Violencia de Género presentado hoy ha sido elaborado por un grupo de trabajo de la Comisión contra la Violencia de Género del Consejo Interterritorial del SNS, coordinado por el Observatorio de Salud de la Mujer y compuesto por representantes de las CCAA, de la Delegación Especial del Gobierno para la Violencia de Género, del Instituto de la Mujer y de la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad y Consumo.
El Protocolo proporcionará a los profesionales sanitarios unas pautas de actuación homogéneas tanto en la atención y seguimiento, como en la prevención y diagnóstico temprano. La finalidad última es ofrecer orientaciones al personal sanitario del SNS para la atención integral –física, psicológica, emocional y social- a las mujeres que sufren violencia de género y que acuden a un centro sanitario.
PAUTAS DE ACTUACIÓN
En función de dichos objetivos, el protocolo incluye dos primeros apartados en los que se repasan los conceptos generales sobre las causas, procesos y consecuencias que para la salud tiene la violencia de género. También se pone de manifiesto la importancia que puede tener el personal de los servicios sanitarios en la ayuda a las mujeres que sufren violencia de género.
El protocolo tiene en cuenta las características de los distintos niveles asistenciales (tanto en consultas como en urgencias de Atención Primaria y Especializada) y ofrece a los profesionales de cada uno de estos servicios recomendaciones específicas tanto sobre lesiones como sobre actitudes que puedan hacer sospechar que se encuentran ante una mujer que sufre violencia de género.
También facilita información sobre los aspectos jurídicos y éticos que los profesionales deben tener en cuenta frente a casos de violencia ejercida contra las mujeres e incluye una mención general de los recursos a los que se pueden derivar a estas mujeres en las distintas Comunidades Autónomas.
Además de las recomendaciones que permitirán mejorar la actuación de los profesionales del Sistema Nacional de Salud frente a la violencia de género, el texto incluye un capítulo específico sobre procedimientos que deben seguirse ante casos de agresiones sexuales, situaciones que tienen implicaciones forenses y legales especiales que deben conocerse en los centros sanitarios.
El protocolo detalla la información que debería incluir necesariamente el parte de lesiones y el informe médico o clínico de malos tratos. Asimismo se dan pautas para la prevención de la violencia de género en el marco del SNS. El documento se cierra con un anexo de información sobre las actuaciones (guías y protocolos) desarrolladas por las distintas CC.AA. en esta materia. El texto íntegro del protocolo podrá consultarse a través de la siguiente página web (http://www.msc.es/ciudadanos/violencia/violenciaGenero/home.htm).
DETECCCIÓN PRECOZ
La Ministra ha señalado las dificultades que el grupo de trabajo ha encontrado a la hora de trasladar al contexto de la violencia de género el concepto de detección precoz, una práctica habitual en salud pública y que fue concebida para su aplicación a las enfermedades biológicas. Entre otras razones, porque en estos casos los servicios sanitarios tratan las consecuencias en la salud de las mujeres que han sufrido un problema social cuyas causas no son prevenibles sanitariamente.
EVALUACIÓN DEL PROTOCOLO
En la actualidad, la Comisión contra la Violencia de Género del Consejo Interterritorial del SNS está trabajando en la elaboración de unos indicadores que sirvan para evaluar la aplicación y desarrollo del protocolo, así como en el establecimiento de los criterios de calidad que deban aplicarse a la formación al personal sanitario que colabore en su desarrollo.
Por último, la Ministra ha señalado que “este Protocolo es un hito en el camino que nos aguarda en la lucha contra la violencia de género. Somos conscientes de las dificultades que supone eliminar de nuestras sociedades esta plaga. Pero no nos resignamos. Creemos que es un imperativo ético atajarla y que abordando este problema con tesón e inteligencia, trabajando juntos, lo lograremos”.