No vamos a comenzar este artículo con la famosa cita, popularmente atribuida al Quijote de Miguel de Cervantes, de “ladran, luego cabalgamos”, que como ya sabrán no pertenece al Quijote, puesto que los bibliófilos dicen que se trata de una interpretación que hace otro Miguel, Miguel de Unamuno, en “Vida de don Quijote y Sancho” aunque hay quienes atribuyen esta cita a un diálogo de la inacabada película “Don Quijote”, del afamado director de cine Orson Welles. No es el objeto de este artículo determinar la procedencia de dicha frase, sino “hablar”, y mucho, sobre la prevención de riesgos laborales en los autónomos, esos grandes olvidados de la prevención y que en España ocupan alrededor del 20% de la población trabajadora, o, lo que es lo mismo, una quinta parte de los trabajadores que aparecen como población activa en España son autónomos o por cuenta propia.