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CASI 150.000 MAYORES DE 65 AÑOS PADECEN LA ENFERMEDAD DE PARKINSON

Salud General

Según datos del Ministerio de Sanidad, uno de cada 400 pacientes neurológicos son enfermos de Parkinson

El 2% de los españoles mayores de 65 años, cerca de 150.000 personas, sufren la enfermedad de Parkinson, según datos de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) la segunda neurodegenerativa más frecuente después del Alzheimer.

Según datos del Ministerio de Sanidad manejados por la SEGG, uno de cada 400 enfermos neurológicos son enfermos de Parkinson, detectándose un caso nuevo al año por cada 1.000 habitantes mayores de 50 años.

La doctora Almudena Garnica, geriatra del Hospital Universitario Sant Joan de Reus y miembro de la SEGG, alerta del hecho de que exista un porcentaje importante de afectados, "fundamentalmente ancianos", que "estando en fases iniciales de la enfermedad no consultan por estos primeros síntomas atribuyéndolos al envejecimiento".

En un comunicado de la SEGG, la doctora Garnica recuerda que "hasta el momento" no se ha encontrado ninguna manera de prevenir o curar esta enfermedad que afecta a las zonas del cerebro encargadas del control y coordinación del movimiento y tono muscular y de la postura. Sin embargo, recalca, "los síntomas se pueden controlar de forma eficaz con tratamiento farmacológico y, en ocasiones, con cirugía".

"La causa de la aparición de esta enfermedad -agrega- es aún desconocida, aunque la predisposición genética y ciertos factores ambientales pueden tener un papel causal en los cambios celulares que originan la progresiva destrucción neuronal".

Factores ambientales, "como los pesticidas, el agua de pozo, vivir en el campo, no fumar o beber poco café, se han relacionado también -apunta la doctora Garnica- con la aparición de la enfermedad, pero los resultados de estos estudios aún no son concluyentes".

Con motivo del Día Mundial del Parkinson, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología insiste en la importancia de consultar al médico de atención primaria "ante la aparición de los primeros síntomas", temblor y lentitud de movimientos.

En su comunicado, la Sociedad destaca que, una vez diagnosticada la enfermedad, es importante "el abordaje integral del paciente por varios profesionales" -médico, enfermero, fisioterapeuta, logopeda, trabajador social,...- "para así valorar de forma global todas las necesidades".

También pone de manifiesto la importancia de consultar al especialista ante la aparición de síntomas no motores, como problemas de memoria, alteraciones en el contenido del pensamiento, trastorno del estado de ánimo, dolor o dificultades para conciliar el sueño, entre otros.