Imagen Noticias

VALORES DIETÉTICOS DE REFERENCIA PARA EL CONSUMO DE NUTRIENTES

Salud General

El Panel de Productos Dietéticos, Nutrición y Alergias de EFSA ha establecido valores dietéticos de referencia para el  consumo de carbohidratos, fibra dietética, grasas y agua. Las recomendaciones de EFSA sobre el consumo de nutrientes constituyen una buena base para el diseño de políticas nutricionales, el establecimiento de objetivos de salud pública relacionados con la dieta y el desarrollo de programas de información y educación al consumidor sobre dietas saludables.

Se han publicado 5 opiniones científicas que han sido adoptadas por el panel después de una consulta a los estados miembros, la comunidad científica y otros sectores implicados.  Gracias a esta consulta, EFSA ha contado con un amplio abanico de puntos de vista para concluir su trabajo y facilitar unas recomendaciones actualizadas, claras y comprensibles para su uso en la toma de decisiones.

Los valores dietéticos de referencia indican, dependiendo de la edad y el género, la cantidad de un nutriente que se necesita para el mantenimiento de buena salud. La Comisión Europea solicitó a EFSA actualizar las recomendaciones europeas existentes teniendo en cuenta los avances científicos y las recomendaciones que se han realizado recientemente  a nivel nacional e internacional.

Las conclusiones del Panel son las siguientes:

  • La ingesta total de carbohidratos, incluyendo los carbohidratos de  alimentos con alto contenido en almidón como la patata y la pasta  y los carbohidratos simples como el azúcar, debe encontrarse entre el 45 y el 60 % del total de la energía consumida tanto para adultos como para niños.
  • En cuanto a los azúcares, hay evidencias claras de que el consumo frecuente de comidas con alto contenido en azúcares aumenta el riesgo de la caída de los dientes. También se ha establecido relación entre un alto consumo de azúcar en refrescos azucarados y la ganancia de peso. No obstante, el Panel no disponía de información suficiente para establecer niveles máximos de consumo de azúcar. Esto es debido a que los posibles efectos sobre la salud están relacionados fundamentalmente con patrones de consumo, el tipo de productos consumidos y la frecuencia de su consumo, más que  con el consumo total de azúcar propiamente dicho. Esta evidencia sobre patrones de consumo de productos de alto contenido en azúcar deberá tenerse en cuenta cuando se realicen recomendaciones y se desarrollen a nivel nacional Directrices dietéticas basadas en alimentos.
  •  Un consumo diario de 25 gramos de fibra dietética es adecuado en adultos para el normal funcionamiento del intestino grueso. Además, la evidencia muestra que en adultos hay otros beneficios asociados a un elevado consumo de fibra dietética (ej: se reduce el riesgo de enfermedades de corazón, diabetes tipo 2 y se facilita el control de peso).
  • Con la información disponible, no se puede llegar a conclusiones claras sobre el papel que juega el índice glucémico y la carga glucémica  en el mantenimiento del peso y la prevención de enfermedades relacionadas con la dieta.
  • El consumo de grasas debe encontrarse entre el 20 y el 35 % del total de la energía consumida. Para bebes y niños pequeños existen diferentes valores teniendo en cuenta sus necesidades específicas de desarrollo.
  • Hay suficientes pruebas científicas para afirmar que elevadas ingestas de  grasas saturadas y grasas trans provocan un incremento de los niveles de colesterol en sangre que puede contribuir al desarrollo de enfermedades de corazón. Los legisladores deben tener presente el beneficio de limitar el consumo de grasas saturadas y grasas trans, reemplazándolas por el de ácidos grasos mono y poliinsaturados, a la hora de realizar a nivel nacional e internacional, recomendaciones nutricionales y desarrollar Directrices dietéticas basadas en alimentos.
  • Un consumo diario de 250 mg de ácidos grasos de cadena larga omega 3 en adultos reduce el riesgo de enfermedades cardíacas.
  • Para el agua, se considera adecuado un consumo diario de 2.5  litros para mujeres y 2 litros para hombres.

El Panel también ha publicado otras dos opiniones, una estableciendo los principios generales para establecer los valores de referencia dietéticos, y otra aconsejando a los legisladores sobre cómo elaborar mensajes alimenticios a partir de las recomendaciones nutricionales a través de Directrices dietéticas basadas en alimentos (FBDGs). Las FBDGs pueden orientar a los consumidores sobre qué comer y ayudarles a tomar decisiones dietéticas saludables.